“La tierra clama nuestros nombres”: Crudísimo, real e imperdible debut de Javier Armendáriz
El ganador del premio Oculus 2024 nos abofetea a lo largo de sus páginas sin piedad.
Siempre ando en busca de literatura nacional de calidad. Ahora mismo estoy envuelto en mi bandera y sumergido en obras escritas por puños y letras mexicanas.
Estoy haciendo lo mismo que se dice de los habitantes del Reino Unido y que desconozco que tan cierto es: “los británicos solo leen autores británicos”.
Aunque con un twist.
Estoy leyendo a autores mexicanos desconocidos para las masas. Es decir, de momento quedan fuera los Paco Ignacio(s), Juan Villoro(s), Carlos Fuentes(es), José Emilio Pacheco(s) y demás plumas consagradas en México y el mundo.
LA TIERRA CLAMA NUESTROS NOMBRES
Estaba recorriendo los stands en la Feria Internacional del Libro Coyoacán (FILCO) en la Ciudad de México y vi una portada que me atrapó al instante.
Cabe decir que yo sí juzgo a los libros por su portada, y me vale. Claro está que, si la sinopsis no me atrapa, regresa al aparador.
Lo tomé y le di la vuelta para conocer qué me iba a encontrar.
La realidad es que la explicación de Alberto Chimal no me ayudó demasiado. Y lo entiendo, porque el libro es difícil de encasillar en algún subgénero como terror, fantasía, o policiaco. Mi mejor teoría es que no quiso dar spoilers porque descubrir este libro y cómo se conecta es sencillamente delicioso.
UN ERROR DE MI PARTE
Confieso que, sin tener clara la trama, decidí llevármelo, al fin que vi palabras clave que siempre me atrapan como la miel a un oso: gótico, fantasía y terror.
Además, el espectacular diseño de la portada me hizo pensar que iba a leer algo de mitos y leyendas mexicanas azotando a los indefensos habitantes de un pueblo.
Nada más lejos de la realidad.
O quizá no tanto.
BIENVENIDOS A “LAS COLORADAS”
Este libro es un compendio de relatos cortos que suceden en el ficticio pueblo mexicano de “Las Coloradas”.
Por tanto, estaremos ante un grupo variopinto de personajes de todo tipo. Aquí aparecen todos los clichés que encontraríamos en México: los pobres, los ricos, los malandros, los políticos, los fresas, los machos y otros que me dejo en el tintero para no destripar demasiado a la fauna que encontraremos entre sus 198 páginas.
Si bien me equivoqué pensando que encontraría un libro de corte fantasioso, el apartado de horror sí que está a la altura.
El horror no se trata de monstruos imaginarios, sino de monstruos reales.
Esos que azotan a los pueblos y se aprovechan de la gente humilde y manipulable utilizando las astucias adecuadas.
Esos que anteponen sus intereses con tal de salirse con la suya.
Ese es el horror que se vive en este pueblo ficticio, pero cualquier parecido con la realidad, jamás será coincidencia.
OPINIÓN Y CALIFICACIÓN
Una vez que me quedó claro de qué iba el libro, reacomodé mis ideas y comencé a “disfrutarlo”.
Es extraño “disfrutar” con un libro de esta temática, aunque, he de decir que el bueno de Javier me engañó. El primer cuento, sin entrar en detalles, se llama MAMMON, y se menciona al diablo. En sus primeras hojas pareció que sí me iba a encontrar con algún demonio invocado por habitantes del pueblo o algo así, pero nada más lejos de la realidad.
Del segundo en adelante, teniendo en claro por dónde irían los tiros, me dejé envolver por sus páginas, personajes y formas de actuar. Me encantó la crudeza y realismo con la que se expresan sus personajes. Todos se sienten genuinos (porque, efectivamente, son los clichés que encontramos a diario por las calles) y tienen claras sus motivaciones para comportarse como lo hacen.
Claro está que en estos libros de relatos cortos, es imposible desarrollar al máximo los personajes. Especialmente porque el pequeño pueblo, es el protagonista real.
Las Coloradas se sienten un pueblo que podríamos encontrar en cualquier parte de México.
Confieso también que, por ratos, me recordó a “El Llano en Llamas” del legendario Juan Rulfo, mi libro favorito de todos los tiempos.
Sé que el mismo Javier se sentiría halagado por evocarme al maestro entre maestros, pero diría que estoy loco.
Sin embargo, aunque el estilo de escritura es diferente, Javier logró envolverme en su historia al igual que el maestro. Algo tienen los pueblos que atrapan con su magia.
Sin embargo, conforme avanzas en los relatos, las muecas de disgusto aumentan, y no porque se describan gráficamente sucesos en los que hay derramamiento de sangre, sino porque el actuar de los personajes, en serio, revuelve el estómago. Nunca mejor aplicado lo de que “el fin justifica los medios”.
A pesar de ello, siempre decía “un cuento más”, y así hasta que lo terminé en tres o cuatro sentadas. No quería que terminara.
Y aunque son diversos relatos, el último de ellos me dejó con la cara de “hijo de la chingada, esta, nunca la vi venir”.
Ante escritores con la capacidad de sorprenderte con el final, no resta más que ponerse de pie y aplaudir.
5 de 5 puntos.
BONUS: EL PREMIO OCULUS
Nunca había escuchado de este galardón. Así que me puse a investigar y encontré que es de la editorial INEFABLE.
EDITORIAL INEFABLE CONVOCA AL PRIMER PREMIO OCULUS DE LITERATURA GÓTICA, FANTÁSTICA Y DE TERROR 2024.
La edición 2024 fue la primera en realizarse y vaya debut explosivo.
Me emociona mucho que empiecen a surgir este tipo de premios, pues aunque en México se escribe literatura gótica, fantástica y de terror, suele ser despreciada por la crítica que se enfoca en el ensayo y los dramas de siempre sobre el país.
En México hay grandes autores en espera de ser descubiertos.
Hay que dejar el malinchismo (preferir lo extranjero, para los lectores de esta columna que no son de México) y apoyar lo que hace esta nueva oleada de escritores nacionales que vienen pegando con un tubo.