La Guerra de los Rohirrim: “Un entrañable regreso a la Tierra Media”
Batallas, héroes, venganza y honor, nos esperan en los páramos de Rohan.
Diez años debieron transcurrir para volver a ese mundo épico que Tolkien bautizó como La Tierra Media.
Tras The Hobbit: The Battle of the Five Armies (2014), las salas de cine y los fans de El Señor de los Anillos sentíamos un vacío difícil de llenar, pues estar entre Hobbits, Orcos, Enanos, Elfos y Malos Muy Malos es siempre sinónimo de aventuras, grandes emociones y altas cuotas de heroísmo.
El regreso a La Tierra Media llegó de la visión del genial Kenji Kamiyama en calidad de director y Peter Jackson adoptando el rol de uno de los tropecientos Productores Ejecutivos.
Tengo la teoría de que le invitaron a participar solo para poder colocar su nombre en el tráiler y material promocional, pues todo mundo le recordamos con afecto tras la trilogía original de ESDLA que nos hizo emocionar y conmover entre 2001 y 2003, pero, su participación creativa seguro fue entre discreta y nula. No es que importe, pero, no engañen a la gente.
Historia
(Todo esto viene en el tráiler, cero spoilers).
La historia detona con la visita de Freca a Helm, Rey de Rohan. Se suponía que Freca estaba citado al consejo, pero fiel a su costumbre, parece que se ausentará y Helm dictamina que la reunión terminará pronto. Sin embargo, Freca se hace presente al último instante, haciéndose al ofendido, hasta que ambos personajes se retan a duelo para ver quién tiene la espada más grande.
En las afueras, tras dimes y diretes, comienza el duelo, y sin desearlo, Freca cae sin vida tras ataque de Helm. Ante la incredulidad de lo sucedido, Wulf, hijo de Freca, jura venganza absoluta contra Rohan y sus Rohirrim.
Así comienza la desdicha tanto para Rohirrims como Dunlendinos, 183 años antes de los sucesos ocurridos en Las Dos Torres.
Ambientación
Fue lindo volver a La Tierra Media y recorrer algunas partes de Rohan, Góndor y el Abismo de Helm, al que conoceremos bastante mejor por dentro. Una fortaleza absoluta, complicada de sitiar para cualquiera.
Héra, hija del Helm, también nos adentrará en bosques y praderas donde toda especie de flora y fauna de La Tierra Media harán acto de aparición.
Los Olifantes se ven majestuosos y más mortales que nunca.
Los castillos, aldeas y forma de vida te transportan a una época antigua, en la que la esperanza de vida era sumamente baja, ya sea por enfermedades, o porque era muy sencillo recibir un flechazo, o bien, que cualquier malandro te incendie el techo de paja.
Y si, además, se le añaden pistas clásicas de Howard Shore, creador de la banda sonora original de ESDLA, estamos ante una Tierra Media que se siente viva, como si nunca nos hubiésemos ido.
¿O es la nostalgia hablando?
Personajes
Helm y Freca abren la contienda, pero son Héra y Wulf los protagonistas reales de esta historia.
Freca aparece poco, mientras que Helm resulta un tremendo Rey de Rohan que llena la pantalla con su presencia. Me gustó que no fuese de esos que solo dan órdenes, sino que es un monarca activo y listo para la acción. Su personaje tendrá un desarrollo emotivo, siempre buscando el bienestar de los suyos, aunque, a veces, algo necio.
Y, como buen Rey, adora a su hija Héra al grado de poder catalogar su comportamiento como sobreprotección. Aunque bueno, creo que nadie puede culparle de querer cuidar a su hija en esas tierras donde el peligro acecha en cada rincón.
Hablando de Héra, encontramos en ella a la típica chica adelantada a su época. Lejos de ser una damisela en apuros, le veremos obstinada y testaruda con sus ideales. En ella también encontraremos un desarrollo significativo, aunque, a decir verdad, poco sorpresivo. Ella está mandada a ser la heroína del cuento, justo como insinúan los tráilers y pósters que acompañan al largometraje.
Y si Héra es testaruda, Wulf es una locura. Es la ira y venganza hecha persona. Odia a Helm y todo aquel relacionado con los Rohirrim tras la muerte de su padre, y además, una razón que tiene que ver con la pelirroja Héra, que no voy a destripar aquí.
Wulf es un malo muy malo. Quiere sangre, quiere venganza, quiere llevarse a todos puestos sin importar las consecuencias. Perseguirá y acechará a todos sin tregua ni descanso. Me pareció un grandísimo personaje, quizá el mejor de todos ellos.
Opinión
Más allá de la vuelta a La Tierra Media, la historia se siente un poco genérica. Es decir, tenemos a dos bandos enfrentados, situación que se resuelve desde siempre entrando en guerra.
Tenemos a la hija que no se quiere casar porque ella desea ser feroz guerrera.
Y tenemos al malvado consumido por la ira, que buscará vengarse por todos los medios de lo que le han hecho, porque en aquellas épocas, ser ofendido tenía que pagarse con sangre.
Este tipo de tópicos los conocemos de sobra los asiduos a la fantasía. Lo que le da el toque distintivo, es ambientarlo en La Tierra Media y usar a sus diversas criaturas y mitos para darle sabor Tolkeniano.
La cinta luce increíble en pantallas de cine. Este tipo de obras hay que verlas en las pantallas más grandes disponibles; es la única forma de dimensionar su epicidad.
Sin embargo, habiéndola visto en pantallas Macro XE de Cinépolis, me quedo con la impresión de que, precisamente, eso le faltó: ser más épica.
Si no existieran las películas originales (o incluso la trilogía de El Hobbit) diría que hubiera salido de la sala con la sonrisa de oreja a oreja.
Salí bien, salí contento, pero no creo que vaya a recordarla como las tres primeras películas de la mano de Peter Jackson.
Me gustó volver a La Tierra Media, y creo fervientemente que podrían hacer un par de producciones más con este estilo de animación.
Calificación
Con todo lo dicho, le daré un 7 de 10.
Me parece una cinta sólida cuyo gran problema es ser tener que coexistir con el material existente a nivel cinematográfico de ESDLA.
Lo mejor de la cinta es todo el drama que ocurre dentro del Abismo de Helm. Fue realmente espectacular, y lo que, a mi juicio, termina dándole puntos adicionales a la cinta.
Y que no se malinterprete: no soy de esos weirdos que odian todo lo nuevo y que tienen a Peter Jackson en un altar.
Realmente entré con ganas de ponerle diez, porque amo La Tierra Media, pero tengo que ser sincero y bajarle algunos puntos, esto sin quitarle méritos porque, al final, es una película disfrutable.
Diría que fue un caso similar a mi reseña de Gladiador II: “Buena, pero no legendaria”.